jueves, 14 de octubre de 2010

Una noche que hasta las estrellas la envidiaban…


Hoy Abrí mis ojos y te miré allí…

En silencio te contemplaba…

Te acaricié despacio para que no despertaras…

Y suavemente te decía frases

Que expresaban cuánto yo te amaba…

Y es que tuve un hermoso sueño

El firmamento estaba oscuro como el heno

Adornado por millones de estrellas

Tus caricias me dejaban sin aliento

Simplemente… era un escenario perfecto…

Por instantes me sonrojaba

Pues tus tiernas caricias recorrían mi piel y la excitaba

Sentía tus labios y podía oler tu fragancia

Se me helaba la piel,

Quedé congelada ante el placer que me causabas…

Inconcebible no ceder a la locura

Pues presos del amor y la pasión

De testigo el cielo y sus astros nocturnos

Presenciaban extasiados

La fusión de almas y cuerpos en el amor más puro…

Que bello sueño…pensaba!

Mi cuerpo aún vibraba…

Pero algo sucedió…

No era un sueño,

Sólo soñé que lo soñaba…

Sonreí al despertar en realidad,

Pues tus labios en los míos se encontraban…

Entonces me di cuenta que no fue un sueño…

Era el más bello recuerdo

De una noche que hasta las estrellas la envidiaban…

Crystaluz…

4 comentarios:

  1. Muy hermoso Taty, no dejo de emocionarme con tus letras y con ese amor que hace que tu poesía derrame ternura.
    Un beso enorme

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  2. Creo que no sería precisamente envidia, las estrellas se sienten orgillosas, al igual que yo.

    Besos mi cuñi

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  3. Un bello no sueño, un apasionado amor entre la fusión de dos corazones, entre latidos ardientes que encienden el alma...
    Precioso poema Taty, que siempre vivais ése hermoso "no sueño".
    Un gran beso para ambos.

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  4. Con tu no-sueño me hiciste soñar...
    un día espero despertar con tu misma felicitad,tiene que ser maravilloso enterarse que tu sueño es realidad...

    Tus versos se entralazan a tu amor y viceversa.
    Precioso Taty,

    un abrazo,

    Claire

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